Efervescencia hotelera en Madrid: 3.000 nuevas habitaciones en dos años
- 20 hoteles, la mitad de cinco estrellas, abrirán en los próximos dos años en la capital, sobre todo en el centro
- La escasa oferta de hoteles de lujo, la alta conectividad de la ciudad y lo económico del m2 hotelero, detrás del ‘boom’
En marzo abre el Gran Hotel Inglés, un establecimiento de lujo en el que era el hotel más antiguo de Madrid, en pleno Barrio de las Letras. En abril, NH pone de largo su gran apuesta en el centro, abriendo otro establecimiento de cinco estrellas en la Gran Vía, donde también ha puesto sus ojos Cristiano Ronaldo, que junto al grupo portugués Pestana levantará un hotel de gran lujo en 2019 sobre la Casa del Libro. En primavera, 214 habitaciones de cinco estrellas estarán ya disponibles para su uso en el corazón de Plaza España de la mano de VP.
Son algunos ejemplos de la fiebre hotelera que vive la capital, que en los próximos dos años verá cómo aumenta su capacidad en más de 3.000 habitaciones (en la actualidad hay más de 43.000), la mitad de ellas de gama superior. De los 20 hoteles que abrirán próximamente, 11, la mayoría de ellos en el centro, son de gran lujo. ¿Qué ha ocurrido para que de repente la ciudad viva este boom hotelero?
Según datos de la consultora JLL Hotels & Hospitality, Madrid lidera el ránking de comunidades donde más se invirtió el año pasado en hoteles, con 600 millones, por delante de Málaga (550) o Barcelona (530). Un buen año para el sector a nivel nacional, que alcanzó una inversión total de 3.870 millones, superando en casi un 75% las cifras del año anterior.
«La existencia de una oferta hotelera diversificada, grupos hoteleros de primer nivel y un clima agradable han atraído de nuevo a los inversores», dicen en esta consultora especializada, donde creen que esta primavera hotelera ha sido espoleada por la «normalización de la situación política» y «la notable mejora a nivel macroeconómico», que hacen que los inversores se sientan más seguros de invertir en nuestro país, y más concretamente en Madrid.
Otro de los factores que explican el fenómeno es la llegada de turistas extranjeros, que en España alcanzó cifras récord en 2017, con 82 millones, de los que 6,2 millones pasearon por las calles de la capital (otros tres millones fueron turistas nacionales). «La conectividad de Madrid ha aumentado; se ha situado muy bien de cara al mercado de Asia y América», precisa Bruno Halle, de la consultora Magma Hospitality, sobre la mayor conectividad del aeropuerto Madrid-Barajas, desde donde salen y llegan vuelos a 74 países del mundo.
Pero sin duda en esta llegada masiva de grandes cadenas ha influido lo barato del metro cuadrado comparado con otras ciudades españolas. «Hace dos años Madrid estaba en una situación de ocupación/precio medio más razonable que San Sebastián o Málaga, por ejemplo, y los inversores han visto una gran oportunidad de negocio», señala Bruno Halle, cuya consultora cifra la subida del precio de los inmuebles dedicados a hoteles en Madrid entre un 25 y un 30% en este periodo.
«Nosotros decidimos invertir hace dos años y en este tiempo el precio se ha multiplicado. Ahora el mercado está muy caliente, nosotros ahora no podríamos haber invertido», señala Carmen Cordón, que junto a su marido, Ignacio Jiménez, abre próximamente el exclusivo Gran Hotel Inglés, tras adquirir el viejo hotel por 16 millones de euros y reformarlo, dejando habitaciones de 26 m2, algunas de ellas con jacuzzi.
Turistas ‘foodies’
Según Cordón, hay un amplio nicho de mercado de turistas «foodies y con buen gusto, que quieren hacerse un fin de semana bueno de hotelazo, que busquen una experiencia real, como la del Soho en Londres o Nueva York. Las grandes cadenas se han dado cuenta de lo que pasa». Y lo que pasa es que Madrid era, comparada con el resto de capitales europeas de su entorno, la que menos oferta de hoteles de lujo tenía (31). «Era una oferta muy pequeña comparada con el turismo que viene», según la empresaria.
El turista de alto standing, además, ha puesto sus ojos en Madrid también porque se ha convertido en una capital de la alta gastronomía y del shopping, «lo que atrae turistas chinos y rusos» de alto poder adquisitivo, apuntan desde Magma.
«El reto de la Comunidad de Madrid es conseguir que el turista sea cada vez de más calidad», precisa el consejero de Cultura y Turismo, Jaime de los Santos, que recuerda que el gasto medio del que visita la región es de 219 euros al día por 138 euros en el resto del país. En total, el turismo es responsable de casi el 7% del PIB de nuestra región y genera 383.000 empleos directos e indirectos. «Que los inversores se hayan fijado en Madrid significa que no sólo generamos confianza, sino que nos perciben como un mercado estable».
En la misma línea opina Luis Cueto, coordinador de Alcaldía, que cree que los «inversores» han encontrado un «socio fiable» en el Ayuntamiento, que «ofrece seguridad jurídica», ya que, recuerda, desbloquearon proyectos urbanísticos como la manzana de Canalejas o el Edificio España. Aun así, Cueto cree que ha tenido mayor influencia el «tirón internacional de Madrid, su capacidad de generar riqueza»; el apetito de los inversores, que cuentan actualmente con «mucha liquidez» por la situación económica y la percepción «quizá un poco exagerada» sobre la moratoria hotelera en Barcelona, que deriva inversiones a Madrid. «El centro de Barcelona está saturado, y ya sólo se puede invertir fuera del centro»,precisa Cueto, que asegura que la moratoria de Madrid aun está pendiente del Plan Especial, pero que no hay problemas ahora mismo para convertir en hoteles edificios de uso terciario, además de no haber saturación por ahora en ningún barrio.
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